¿Está nuestra sociedad tan trastornada? ¿ Quién no tiene un amigo, familiar, compañero que no tome algún tipo de psicofarmaco de forma regular?

¿Somos todos ya enfermos mentales?. Esto se pregunta el psiquiatra Allen Frances, catedrático de psiquiatría, quien dirigió durante años el Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM), biblia de la psiquiatría mundial.

La realidad es que existe actualmente una preocupación creciente porque ciertos comportamientos normales o variaciones individuales se etiqueten como trastornos mentales, lo que está llevando a una sobremedicación innecesaria y a la percepción de que todos los aspectos de la vida deben ser «corregidos» médicamente.

Ante una pérdida de un ser querido es normal que sintamos un duelo durante un largo tiempo. Todos pasamos en mayor o menor medida por preocupaciones, decepciones, fracasos… Estos desafíos forman parte de nuestra vida, sin embargo la tendencia actual es a que pueden ser fácilmente considerados “trastornos mentales” que requieren tratamiento médico.

Las pastillas solas no van a solucionar el problema. Por supuesto que ayudan, pero si las se enfocamos como solución rápida, y pasamos por alto otras formas de tratamiento y apoyo, como la terapia psicológica, la modificación del estilo de vida y el apoyo social nunca llegaremos a buen puerto. No olvidemos además que el uso excesivo de medicamentos puede llevar a efectos secundarios no deseados y, en algunos casos, a la dependencia de los fármacos.

Es fundamental que exista un equilibrio entre el tratamiento médico y otras formas de apoyo, para ayudar a las personas a desarrollar estrategias de afrontamiento saludables para conseguir gestionar el dolor, la ansiedad, la tristeza a través de técnicas todo lo naturales y humanas posible.

Tal y como afirma Allen Francés no disponemos de indicadores biológicos que nos permitan separar lo que es normal del trastorno mental. Hasta ahora la ciencia no ha descubierto los innumerables mecanismos que provocan las diferentes formas de psicopatología. La ausencia de estas pruebas biológicas es una enorme desventaja de la psiquiatría. Trastorno mental y normalidad, son conceptos extremadamente heterogéneos y cambiantes. Resulta imposible establecer límites fijos entre ambos. Las definiciones de trastorno mental requieren la presencia de desconsuelo, discapacidad, disfunción, descontrol y/o desventaja, pero ¿cuánto desconsuelo, discapacidad, disfunción, descontrol y desventaja tiene que haber y de qué tipo para que sea considere un trastorno mental?

A mediados del siglo XIX, sólo se enumeraban seis trastornos en el censo inicial de pacientes mentales; actualmente son cerca de doscientos. El DSM casi cada año hay una nueva versión. ¿ Existe un deseo de las las empresas farmacéuticas a considerarnos a todos “ trastornados” y buscan sanarnos a toda costa?.

Tienes que saber que antes de recurrir a las pastillas, o como complemento a las mismas, además de una terapia para aprender a gestionar aquello que nos duele o ahoga, la Medicina Tradicional China puede ayudarte y mucho con un amplio conjunto de técnicas y herramientas orientadas a desbloquear esos sentimientos o emociones, a sentirte mucho mejor . La Medicina Tradicional China, que nunca ha separado mente y cuerpo, puede ser una importante barandilla y sobre todo una barandilla natural el camino de tu recuperación y equilibrio emocional.

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